Uruguay pedirá a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) quedarse definitivamente con el trofeo de la Copa América, cuya edición 2011 ganó ayer en Buenos Aires, para exhibirlo en el museo que funciona en el legendario estadio Centenario de Montevideo.
Así lo confirmó hoy Sebastián Bauzá, presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF): "Haremos la solicitud en los próximos días -dijo-. La ganamos 15 veces. Ya está".
Bauzá sugirió que se cree un nuevo trofeo, tal como ocurrió cuando se le dio la copa mundial Jules Rimet a Brasil.
El estadio Centenario es monumento del fútbol mundial por resolución de la FIFA, y allí se encuentran verdaderos tesoros de ese deporte, un patrimonio que Uruguay quiere enriquecer aún más.
Mientras tanto, los uruguayos celebraron hasta altas horas de la madrugada la obtención de la Copa, tras vencer 3-0 a Paraguay en la final de Buenos Aires, un triunfo que confirma la recuperación de una alegría y optimismo que estaban olvidados.
Miles de personas se volcaron a las calles de todo el país y el punto culminante de la euforia de los fanáticos se vivió recién sobre las 3 de la madrugada, cuando los integrantes de la selección ingresaron al Centenario, donde fueron ovacionados por 60.000 personas que esperaban su arribo desde hacía varias horas.
Allí, los jugadores exhibieron la copa y se la dedicaron al pueblo uruguayo, además de dar la tradicional vuelta olímpica, como tantas generaciones victoriosas, en una fiesta que concluyó con fuegos artificiales.
El plantel arribó en un vuelo charter de Pluna desde Buenos Aires pasadas las 22:30 horas y desde la Base Aérea número 1, donde los recibió el presidente José Mujica, se inició lo que parecía ser una interminable caravana que recorrió el trayecto de 15 kilómetros hacia el estadio.
"La final para mí había sido contra Argentina", dijo Mujica, sobre un difícil partido que Uruguay ganó al local por penales, tras igualar 1-1 en 120 de gran tensión, en cuartos de final.
La multitud que se volcó a la Avenida Italia para saludar el paso del ómnibus que trasladaba a la delegación, hacía prácticamente imposible el avance rápido del vehículo, a pesar de las exhortaciones que por altoparlantes realizaba la policía que tenía a su cargo despejar el camino.
La consagración de Uruguay desvió de la atención pública los principales temas de la agenda política y la mayoría de los líderes no estuvo ajena a las celebraciones.
"VAMOOOOS URUGUUUUUUUUAAAAAAAAAY!", escribió en su Twitter el senador y líder del Partido Colorado, de oposición conservadora, Pedro Bordaberry, aprovechando el nombre de su sector, mayoritario en esa colectividad.
Por su parte, el senador del Partido Nacional, también de oposición conservadora, Jorge Larrañaga, escribió en la red social "Pueblo de milagros, esfuerzos y humildad!!!".
Daniel Martínez, senador del Partido Socialista y ex ministro de Industria, se mostró agradecido por lo hecho por los futbolistas uruguayos: "Qué emoción!!!! Qué grande la celeste!!!! gracias maestro, gracias muchachos!!!", escribió en su Twitter.
Periodista Deportivo. Cronista de Transito. Realizador Audiovisual. Creador del sitio www.cestoballargentino.com
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lunes, 25 de julio de 2011
#URUGUAY PEDIRA QUEDARSE CON EL TROFEO DE LA #COPAAMERICA #CA2011
Uruguay pedirá a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) quedarse definitivamente con el trofeo de la Copa América, cuya edición 2011 ganó ayer en Buenos Aires, para exhibirlo en el museo que funciona en el legendario estadio Centenario de Montevideo.
Así lo confirmó hoy Sebastián Bauzá, presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF): "Haremos la solicitud en los próximos días -dijo-. La ganamos 15 veces. Ya está".
Bauzá sugirió que se cree un nuevo trofeo, tal como ocurrió cuando se le dio la copa mundial Jules Rimet a Brasil.
El estadio Centenario es monumento del fútbol mundial por resolución de la FIFA, y allí se encuentran verdaderos tesoros de ese deporte, un patrimonio que Uruguay quiere enriquecer aún más.
Mientras tanto, los uruguayos celebraron hasta altas horas de la madrugada la obtención de la Copa, tras vencer 3-0 a Paraguay en la final de Buenos Aires, un triunfo que confirma la recuperación de una alegría y optimismo que estaban olvidados.
Miles de personas se volcaron a las calles de todo el país y el punto culminante de la euforia de los fanáticos se vivió recién sobre las 3 de la madrugada, cuando los integrantes de la selección ingresaron al Centenario, donde fueron ovacionados por 60.000 personas que esperaban su arribo desde hacía varias horas.
Allí, los jugadores exhibieron la copa y se la dedicaron al pueblo uruguayo, además de dar la tradicional vuelta olímpica, como tantas generaciones victoriosas, en una fiesta que concluyó con fuegos artificiales.
El plantel arribó en un vuelo charter de Pluna desde Buenos Aires pasadas las 22:30 horas y desde la Base Aérea número 1, donde los recibió el presidente José Mujica, se inició lo que parecía ser una interminable caravana que recorrió el trayecto de 15 kilómetros hacia el estadio.
"La final para mí había sido contra Argentina", dijo Mujica, sobre un difícil partido que Uruguay ganó al local por penales, tras igualar 1-1 en 120 de gran tensión, en cuartos de final.
La multitud que se volcó a la Avenida Italia para saludar el paso del ómnibus que trasladaba a la delegación, hacía prácticamente imposible el avance rápido del vehículo, a pesar de las exhortaciones que por altoparlantes realizaba la policía que tenía a su cargo despejar el camino.
La consagración de Uruguay desvió de la atención pública los principales temas de la agenda política y la mayoría de los líderes no estuvo ajena a las celebraciones.
"VAMOOOOS URUGUUUUUUUUAAAAAAAAAY!", escribió en su Twitter el senador y líder del Partido Colorado, de oposición conservadora, Pedro Bordaberry, aprovechando el nombre de su sector, mayoritario en esa colectividad.
Por su parte, el senador del Partido Nacional, también de oposición conservadora, Jorge Larrañaga, escribió en la red social "Pueblo de milagros, esfuerzos y humildad!!!".
Daniel Martínez, senador del Partido Socialista y ex ministro de Industria, se mostró agradecido por lo hecho por los futbolistas uruguayos: "Qué emoción!!!! Qué grande la celeste!!!! gracias maestro, gracias muchachos!!!", escribió en su Twitter.
Así lo confirmó hoy Sebastián Bauzá, presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF): "Haremos la solicitud en los próximos días -dijo-. La ganamos 15 veces. Ya está".
Bauzá sugirió que se cree un nuevo trofeo, tal como ocurrió cuando se le dio la copa mundial Jules Rimet a Brasil.
El estadio Centenario es monumento del fútbol mundial por resolución de la FIFA, y allí se encuentran verdaderos tesoros de ese deporte, un patrimonio que Uruguay quiere enriquecer aún más.
Mientras tanto, los uruguayos celebraron hasta altas horas de la madrugada la obtención de la Copa, tras vencer 3-0 a Paraguay en la final de Buenos Aires, un triunfo que confirma la recuperación de una alegría y optimismo que estaban olvidados.
Miles de personas se volcaron a las calles de todo el país y el punto culminante de la euforia de los fanáticos se vivió recién sobre las 3 de la madrugada, cuando los integrantes de la selección ingresaron al Centenario, donde fueron ovacionados por 60.000 personas que esperaban su arribo desde hacía varias horas.
Allí, los jugadores exhibieron la copa y se la dedicaron al pueblo uruguayo, además de dar la tradicional vuelta olímpica, como tantas generaciones victoriosas, en una fiesta que concluyó con fuegos artificiales.
El plantel arribó en un vuelo charter de Pluna desde Buenos Aires pasadas las 22:30 horas y desde la Base Aérea número 1, donde los recibió el presidente José Mujica, se inició lo que parecía ser una interminable caravana que recorrió el trayecto de 15 kilómetros hacia el estadio.
"La final para mí había sido contra Argentina", dijo Mujica, sobre un difícil partido que Uruguay ganó al local por penales, tras igualar 1-1 en 120 de gran tensión, en cuartos de final.
La multitud que se volcó a la Avenida Italia para saludar el paso del ómnibus que trasladaba a la delegación, hacía prácticamente imposible el avance rápido del vehículo, a pesar de las exhortaciones que por altoparlantes realizaba la policía que tenía a su cargo despejar el camino.
La consagración de Uruguay desvió de la atención pública los principales temas de la agenda política y la mayoría de los líderes no estuvo ajena a las celebraciones.
"VAMOOOOS URUGUUUUUUUUAAAAAAAAAY!", escribió en su Twitter el senador y líder del Partido Colorado, de oposición conservadora, Pedro Bordaberry, aprovechando el nombre de su sector, mayoritario en esa colectividad.
Por su parte, el senador del Partido Nacional, también de oposición conservadora, Jorge Larrañaga, escribió en la red social "Pueblo de milagros, esfuerzos y humildad!!!".
Daniel Martínez, senador del Partido Socialista y ex ministro de Industria, se mostró agradecido por lo hecho por los futbolistas uruguayos: "Qué emoción!!!! Qué grande la celeste!!!! gracias maestro, gracias muchachos!!!", escribió en su Twitter.
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